En más de una ocasión hemos escuchado que los futbolistas del exterior quieren jugar en la cancha de Boca, o en su defecto poder observar un partido en alguna de las tribunas de La Bombonera.

Si uno se remonta a lo que fue la final de la Copa Libertadores del 2001, donde el club de La Ribera se enfrentó a Cruz Azul, el ídolo de la Máquina Cementera, Francisco Palencia, sostuvo que "me acuerdo que se calló el estadio cuando marqué el gol del triunfo allá. Toda la pasión, el folclore y el ruido que hay allí, desapareció". Sin embargo, otros futbolistas sintieron lo contrario.

El partido ante Chivas de Guadalajara, también por la Libertadores, quedó en la retina de todos. Sobre todo de Ramón Morales quien recordó el escándalo con Juan Adolfo Bautista y Martín Palermo: “En el fútbol, miedo sólo tuve una vez y fue cuando fuimos a jugar contra Boca. Creí que nos iban a matar. No del juego, de que nos fueran a matar de verdad”.

Morales añadió, en el podcast Trasmutando que los hinchas de Boca “tiraban unas piedras y le dije al árbitro que acabara el partido, que era un peligro. Le tiraron una piedra a mi portero y no había garantías”. Cuando todo parecía que seguiría en La Bombonera, el colegiado decidió ponerle fin al encuentro.

LA EXTRAÑA SITUACIÓN QUE VIVIÓ OTRO PROTAGONISTA DE BOCA - CHIVAS EN LA BOMBONERA

Luego de la suspensión del partido, el futbolista de Chivas, Amaury Vergara, confirmó que tuvo que marcharse de La Bombonera en una ambulancia. Incluso, tuvo algo de suerte, a diferencia de lo que pasó en la cancha de Boca. 

"A nosotros nos sacó una ambulancia porque nos íbamos a la Copa Confederaciones. Y nos dice el de la ambulancia al Venado Medina y a mí: 'Denle gracias a Dios que somos de River, porque si somos de Boca los matamos'", expresó en el mismo podcast.